Los uniformes personalizados son motivo de orgullo, un símbolo de espíritu de equipo, e incluso a veces, una fuente de ingresos para tu organización. Pero seamos sinceros, uniformes mal ajustados o desgastados pueden rápidamente desinflar ese espíritu de equipo. Aquí te dejamos algunos elementos clave a considerar al personalizar uniformes para asegurarte de que duren no solo una temporada, ¡sino varias!
- Tela: Elige telas que puedan resistir el castigo de las sesiones de entrenamiento. Busca materiales que sean transpirables, que absorban el sudor y que sean duraderos. Considera costuras doblemente reforzadas en áreas de alto estrés para prevenir rasgaduras.
- Función sobre Forma: Para deportes como la gimnasia, prioriza la funcionalidad sobre la estética. Las mangas largas pueden lucir geniales, pero pueden engancharse en agarres y equipos, lo que lleva a que se rompan y haya que arreglarlos o mandar a hacer nuevos.
- Colores: Todos amamos una declaración audaz, pero considera el impacto a largo plazo de las opciones de color. Mientras que los colores vibrantes como el fucsia pueden ser emocionantes al principio, mirarlos durante varias temporadas (prácticas y juegos) puede causar fatiga visual. Opta por paletas de colores agradables y energizantes, pero que no dejen a tu equipo anhelando un cambio cada año. Piensa en combinaciones clásicas o considera incorporar toques de color en elementos de diseño más pequeños.
- Creciendo con el Equipo: Elige un proveedor de uniformes que pueda garantizar pedidos repetidos. Nada es peor que necesitar uniformes adicionales porque nuevos miembros se unieron, solo para descubrir que la tela o el color original ya no están disponibles.
- Fit: Los uniformes mal ajustados son una receta para la incomodidad y la frustración. Asociarte con una empresa de uniformes que ofrezca sizers, prendas de muestra en varios tamaños que los jugadores puedan probar antes de realizar el pedido final. Esto reducirá significativamente el riesgo de pedir tallas incorrectas y terminar con un montón de uniformes inutilizables (y un dolor de cabeza presupuestario).
- Piensa más Allá de la Temporada: Aunque los colores de moda pueden ser tentadores, opta por diseños y paletas de colores atemporales. De esta manera, tus uniformes no lucirán anticuados después de solo un año, ¡ahorrando dinero a tu equipo y reduciendo residuos!
Los uniformes personalizados son una inversión valiosa, fomentando la identidad del equipo y potencialmente generando ingresos. Al tener en cuenta estos consejos de longevidad, ¡puedes asegurarte de que tu equipo luzca impecable y se sienta seguro temporada tras temporada! ¡Recuerda, atletas felices (y billeteras felices) hacen un equipo ganador!