Como coach, tienes el poder de moldear la confianza, la resiliencia y la motivación de tu equipo. La retroalimentación positiva no es solo un elogio superficial: es una herramienta clave para impulsar el crecimiento.

¿Por qué es importante?
- Construye confianza al reconocer el esfuerzo y la mejora.
- Refuerza la motivación al valorar cada avance.
- Mejora el ambiente del equipo al generar un entorno de apoyo.
¿Cómo dar una retroalimentación efectiva?
- Sé específico y genuino: Reconoce acciones concretas y reales.
- Valora el esfuerzo, no solo el resultado: Resalta la dedicación y el compromiso.
- Equilibra el elogio con sugerencias constructivas: Combina el reconocimiento con consejos para mejorar.
- Celebra el progreso, no la perfección: Aplaude cada avance, por pequeño que sea.
Incorpora la retroalimentación en tu rutina:
- Comienza cada práctica con mensajes motivadores.
- Refuerza positivamente durante el juego.
- Reconoce los logros después de cada sesión.
Con palabras adecuadas en el momento justo, puedes despertar el potencial oculto en cada atleta. Lidera con intención, guía con empatía y observa cómo tu equipo alcanza nuevas alturas.